Ante cualquier situación estresante el cuerpo activa una serie de mecanismos que lo preparan para afrontar esa amenaza. Estos mecanismos son la liberación de adrenalina, de cortisol, la producción de citoquinas (IL6,IL1…)etc..
Si la situación estresante se mantiene de forma continua durante demasiado tiempo , estos mediadores, en lugar de ayudarnos a defendernos de la amenaza, provocará la aparición de enfermedades cardiovasculares, diabetes, depresión, ansiedad, alteración de capacidad de curación de tejidos, activación de herpes virus…
La cavidad oral también se ve afectada por el estrés. Los problemas bucodentales que pueden relacionarse con estados de estrés prolongado pueden ser:
-
Por tanto, ante el estrés, 3 sencillas recomendaciones a seguir:
1. Fije horarios regulares para realizar actividades relajantes, gratificantes y saludables.
2. Acuda a su dentista periódicamente para prevenir problemas periodontales así como desgastes o fracturas dentarias, dolores de cabeza, contracturas musculares…derivados del bruxismo
3. Las situaciones estresantes muchas veces no van a desaparecer, por lo que debemos aprender a identificarlas y reducirlas a niveles más tolerables. Si es necesario, debemos pedir ayuda a un profesional